Este martes comenzarán a regir las nuevas normativas de la Comisión Nacional de Valores sobre el acceso a los dólares financieros, También se retomarán las negociaciones con empresas de consumo masivo.
Tras la preocupación que generó la escalada del dólar blue que se precipitó la semana pasada, Sergio Massa avanzará en su intento por conseguir cierta estabilidad que permita llegar a las elecciones sin sobresaltos en el frente cambiario. Por eso, desde este martes se pondrán en marcha las nuevas restricciones para operar en los dólares financieros, en busca de controlar también el tipo de cambio informal. Paralelamente, se retomarán las negociaciones con empresas para acordar un nuevo sendero de aumentos por 90 días, con el objetivo de reducir el impacto que ya tuvieron las tensiones cambiarias sobre la inflación.
Desde esta mañana entrará en vigencia la Resolución General 959 de la Comisión Nacional de Valores (CNV), donde se aplicaron dos nuevas restricciones para operar con dólares financieros, cuyo tipo de cambio nace del resultado de dividir la cotización en pesos de un bono bajo legislación local o extranjera por una contraparte en dólares.
En el caso del CCL, el dinero queda acreditado en una cuenta del exterior, por lo que se utiliza para sacar divisas del país, mientras que el MEP suele ser un poco más barato porque queda dentro del sistema local. Ambos son tipos de cambio de curso legal.
La primera restricción que impuso la CNV establece que los inversores no podrán hacerse de dólar MEP o CCL a través de fondos del mercado de cauciones, en donde se ponen títulos como garantía para conseguir financiamiento a tasas accesibles. Ahora deberán utilizar liquidez propia, es decir, pesos que tengan en su poder.
Además, la normativa puso un límite a las operaciones de las sociedades de bolsa, a partir del cual deberán finalizar las jornadas con la misma cantidad de títulos comprados y vendidos. Ese “neteo” implica que al final del día saldrán los mismos dólares que ingresaron al sistema o fundamentalmente al BCRA.
Preocupación por el FMI y la brecha cambiaria
La razón de ambas decisiones tiene que ver con que, a pesar de no tener el visto bueno del FMI, el BCRA comenzó a usar parte de sus escasas reservas para contener el avance de los dólares financieros. El objetivo de estas medidas es frenar el alza del dólar blue, que rozó los $500 el martes y luego de la intervención de la autoridad monetaria se desinfló hasta los $469 el viernes.
Según comentaron fuentes del Ministerio de Economía a TN, era una mala señal hacia el organismo alimentar la especulación con el poco poder de fuego de la autoridad monetaria, sobre todo en el marco de las negociaciones en marcha para flexibilizar el acuerdo.
Pero la principal preocupación del equipo de Sergio Massa se explica por la brecha cambiaria, es decir, la diferencia de los tipos de cambio paralelos con el oficial mayorista con el que se pagan las importaciones, que cotiza a $222,70. La brecha con los dólares financieros cerró la semana entre un 98% y un 96% ($441 y $437 para el CCL y el MEP, respectivamente), mientras que el dólar blue cerró el viernes en $469, con una brecha del 111%, según estimaciones de Ecolatina.
“Mantener contenida a la brecha cambiaria es parte esencial del plan Massa y un desafío transversal al frente de los dólares, el frente de los pesos y el frente de los precios: actualmente, un salto en los dólares paralelos se filtra con mayor facilidad la inflación (probablemente veamos algún impacto en los números de abril y mayo) y aumenta las expectativas de devaluación, reduciendo aún más la oferta neta de divisas”, indicaron en la consultora.
Acuerdo de precios, otra vez
En ese contexto, las remarcaciones de precios se dispararon en abril y ahora los especialistas esperan que la inflación se acerque al 8% mensual. Para mayo, en tanto, la inercia dejará un nivel similar y se agregará un fuerte aumento de tarifas que rondará el 85% y 90% para los hogares con mayores ingresos, que dejarán de percibir subsidios.
Fuentes de la Secretaría de Comercio indicaron a TN que este martes también se retomarán las negociaciones con empresas para retrotraer precios en productos que sufrieron importantes aumentos en las últimas semanas, acordar una nueva pauta de incrementos por 90 días para Precios Justos, una nueva canasta de productos congelados y un sendero para los insumos difundidos de la industria. Entre las convocadas se mencionaron a Mondelez, Unilever, CCU, la asociación de panaderos y las cadenas de supermercados, como Cadam y FASA.