Durante una entrevista televisiva, Javier Milei señaló que el ajuste en las provincias es uno de los objetivos innegociables para alcanzar el déficit cero y volvió a apuntar contra gobernadores y diputados.
Javier Milei valoró que desde su Gobierno “empezamos a hacer fuertes recortes del gasto público: hemos echado 50.000 empleados públicos; había 10.000 contratos que vencían y no lo hemos renovado; eliminamos 200.000 programas sociales dados de manera irregular; bajamos 98% las transferencias discrecionales a las provincias”. Además, apuntó que “eliminamos la obra pública, que es una fuente de corrupción gigante”.
En ese marco, reiteró que “la motosierra y la licuadora, que son los pilares del ajuste, no se negocian. El déficit cero no se negocia. El proceso de saneamiento del Banco Central no se negocia. Y una vez que tenemos el equilibrio fiscal y tenemos saneando el Banco Central vamos a estar en condición de abrir el mercado cambiario, y ahí vamos a tener un rebote de actividad económica”.
El Presidente consideró que “los políticos no quieren ceder sus privilegios” y que “muchos son delincuentes que se disfrazan de ovejas y son lobos. Obvio que son delincuentes: le mienten abiertamente a la gente, porque le hablan de cambio”. “Lo más maravilloso que pasó con la ley es que cuando la empezaron a desguazar dejaron todos los dedos de quiénes estaban sucios. La votación mostró quiénes son realmente los que están a favor de un cambio por las ideas de la libertad y quiénes son los delincuentes que quieren seguir con este sistema de privilegios en donde los políticos se enriquecen”.
“Es por eso que la levanto a la ley”, aseguró: “Frente a tener una ley mala, prefiero no tener una ley”. “Los objetivos pueden esperar porque hay un montón que dejaron los dedos sucios frente a la gente”, entendió y dijo que los que rechazaron su proyecto: “Votaron a favor de los curros y los delincuentes. Después cuando dicen que quieren el cambio y que son republicanos, no: Ustedes son una manga de delincuentes”.
Finalmente, pronosticó que “lo más lindo es que en el 2025 no van a pasar. El Congreso va a ser depurado en el 2025 de los delincuentes. Nosotros mismos se lo vamos a recordar a la gente quiénes son sus enemigos. La gente detesta y desprecia a los políticos. Sienten ascos por ellos. Y esta votación demostró que tienen razón”.
El mandatario señaló que en la votación en particular de la ley ómnibus “saltó toda la porquería de la política”. Y fue por más al vincular los “curros” con los fideicomisos: “Vamos a avanzar fuertemente contra todas las cajas negras de la política”.
Sobre una posible eliminación de los fideicomisos, reconoció que está en sus planes: “Si los tengo a tiro de decreto, anotalo porque son boleta. Toda esas runflas son como u$s20.000 millones”. Si bien algunos pueden ser derogados a través de la firma del presidente, admitió que no todos se pueden ser eliminados por dicha vía.
“Eso hay que terminarlo”, dijo y agregó que la posibilidad de que sean eliminados “pone muy nerviosa a mucha gente de la política que vive de eso”.
A propósito de las críticas contra el ajuste del Gobierno, dijo que hay una parte de la sociedad que espera que no culmine su mandato. “Sí, estoy consciente de que quieren que me vaya antes”, afirmó.
Siguiendo esa línea, apuntó contra el exjefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, como uno de los que desean que abandone el gobierno antes de tiempo: “Los que gritan ‘Viva el consenso, carajo’. Lo digo por Larreta, ¿por qué no dice mejor ‘viva la corrupción’?”, agregó.