La medida regirá desde el 1 de enero. Hay prohibición total para los procedentes de cinco naciones más Palestina. Ya totalizan 35 los países con bloqueos de viaje
El presidente Donald Trump amplió las restricciones de entrada a Estados Unidos para sumar a otros 20 países, apenas unas semanas después de que prometiera hacerlo cuando las autoridades detuvieron a un ciudadano afgano por el tiroteo contra dos soldados de la Guardia Nacional en Washington.
La política revisada, que entrará en vigor el 1 de enero, bloquea totalmente la entrada en Estados Unidos a personas procedentes de otros cinco países -Siria, Sudán del Sur, Níger, Malí y Burkina Faso- y también de personas con documentos expedidos por la Autoridad Palestina. El gobierno de Trump también añadió restricciones parciales a la entrada de personas procedentes de otros 15 países, principalmente de África. Con la ampliación, ahora hay más de 35 países con restricciones de entrada en Estados Unidos.
Trump instituyó por primera vez en junio una prohibición de entrada a 12 países, entre ellos Afganistán, y después del tiroteo del mes pasado prometió “detener permanentemente la inmigración procedente de todos los países del tercer mundo”. Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional, dijo que había recomendado a Trump “una prohibición total de entrada a todos los malditos países que han estado inundando nuestra nación de asesinos, sanguijuelas y adictos a sentirse con derecho”.
Las restricciones parciales de entrada se aplican a personas procedentes de Angola, Antigua y Barbuda, Benín, Costa de Marfil, Dominica, Gabón, Gambia, Malawi, Mauritania, Nigeria, Senegal, Tanzania, Tonga, Zambia y Zimbabue.
La nueva política se aplica también a cónyuges, hijos y padres de ciudadanos estadounidenses, así como a las visas especiales para inmigrantes afganos, que se crearon para personas que habían ayudado al ejército y al gobierno estadounidenses durante la guerra de Afganistán. La política también prohíbe la entrada a hermanos e hijos adultos de ciudadanos estadounidenses, así como a estudiantes internacionales.
En conjunto, la nueva política de Trump amplía sustancialmente sus medidas enérgicas contra las formas legales de inmigración, ya que el gobierno limita total o parcialmente la entrada desde casi el 20% de los países del mundo. La política revisada también amplía en gran medida las restricciones impuestas a las personas procedentes de países con prohibiciones parciales.
“Esta proclamación ampliada cierra realmente la puerta a casi todos los no ciudadanos de los países incluidos en la lista”, dijo Doug Rand, exfuncionario de alto rango del Departamento de Seguridad Nacional durante el gobierno de Joe Biden.
Trump y sus principales asesores argumentaron que las restricciones de entrada son necesarias para proteger la seguridad nacional, y los aliados del presidente aplaudieron la ampliación el martes.
“Esto es sentido común: si no sabes quién es alguien, o si hay riesgos asociados a su presencia en Estados Unidos, no deberías dejarlo entrar”, escribió en X Gene Hamilton, presidente de America First Legal, un grupo afín a Trump.