La cumbre será en Resistencia, con Capitanich como anfitrión. Fueron invitados 16 mandatarios del Frente de Todos. Hubo diálogo previo con la UIA y habrá planteos para Guzmán y Scioli.
El presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner continúan sin verse ni dialogar entre ellos y los cruces públicos van escalando la tensión interna en la coalición de gobierno Frente de Todos, lo que genera preocupación entre los gobernadores que miran a 2023 mientras de reojo observan el deterioro socioeconómico que está provocando la inflación más alta en treinta años.
Los gobernadores oficialistas quieren pasar a la acción tras meses de silencio en un marco de guerra fría en lo más alto del poder. Pocos logran hablar con Cristina y ninguno ha logrado hasta ahora que Fernández –quien también preside el Consejo Nacional del Partido Justicialista- convoque a la institucionalización de la coalición.
Mientras, la vicepresidenta ha decidido elevar la presión para que el Presidente y sus ministros mejoren la calidad de la gestión, con medidas más acordes a lo que fue el Gobierno que ella presidió entre 2011 y 2015, aunque sin considerar que los resultados por entonces no han sido los mejores. Las reservas netas, por ejemplo, terminaron en valores negativos el último mandato cristinista.
Ahora, la vicepresidenta exige mano dura en el control de importaciones. Pide “usar la lapicera”, como la usaron Guillermo Moreno y Augusto Costa, sus dos secretarios de Comercio. Y espera que el recientemente designado Guillermo Michel en la Dirección General de Aduanas (DGA) ponga la lupa sobre la sobrefacturación de importaciones y subfacturación de exportaciones.
Esto último es un mecanismo que, según el kirchnerismo, está provocando que el Banco Central no pueda sumar reservas en el mejor momento en términos de intercambio para la Argentina desde 1983 hasta la actualidad. Algunos hombres de negocios como el multimillonario Eduardo Constantini reconocen que este problema existe en el país.
SCIOLI Y MICHEL, EN ACCIÓN
Con Daniel Scioli en Desarrollo Productivo, el Gobierno puso manos a la obra para vigilar mejor el comercio exterior del país, que este año podría generar exportaciones por más de 90.000 millones de dólares. El nuevo ministro fue el martes a la sede de la Unión Industrial Argentina.
En el primer piso de Avenida de Mayo 1147, Scioli fue recibido por Daniel Funes de Rioja y otros hombres de negocios, entre los cuales había representantes de grandes empresas que son apuntadas por Cristina por sobrefacturar importaciones y subfacturar ventas.
Los empresarios reclamaron mejor acceso a la disponibilidad de divisas para importar insumos, garantizar la provisión de gas y electricidad este invierno y más créditos productivos; y plantearon su preocupación por la escasez de gasoil que sigue golpeando a las provincias.
Scioli les planteó la necesidad de acelerar el agregado de valor en origen, de sustituir importaciones y anticipó que habrá un mayor control de las ventas y compras que las grandes compañías hagan en materia de comercio exterior.
La vicepresidenta había dicho el lunes en Avellaneda que 600 empresas controlan el 75% de las importaciones, mientras que el 25% restante está divido en 24.000 compañías. Y exigió poner la lupa sobre las primeras. En eso andan ya Michel, Scioli y la titular de la AFIP, Mercedes Marcó del Pont.
Un rato antes de recibir a Scioli, los empresarios se juntaron con el gobernador de Chaco, Capitanich, un dirigente cercano a la vicepresidenta. El mandatario norteño fue a Buenos Aires a buscar proyecciones de los hombres de negocios sobre la actividad económica.
Al margen de hablar del desempeño de los sectores productivos del Chaco, el gobernador se llevó impresiones del Comité Ejecutivo sobre los principales temas de discusión en la agenda pública nacional.
Y este viernes 24, a las 13:30, el chaqueño será el anfitrión del encuentro de la autodenominada Liga de Gobernadores, un espacio político integrado por 16 mandatarios y mandatarias que son parte del Frente de Todos, en un salón de convenciones de un conocido hotel resistenciano.
Diversas fuentes cercanas a tres gobernadores comentaron a este medio que hay preocupación por el impacto de la inflación tanto en las finanzas públicas –por la creciente demanda salarial- y por el clima social que se pueda generar hacia fin de año.
En la Liga de Gobernadores hay preocupación también por la quebrada relación política entre el Presidente –que controla hoy la caja de recursos- y la vicepresidenta, que es la dueña de la parte mayoritaria de los votos del oficialismo.
“Hay que construir un puente hacia el año 2023″, dicen entre los mandatarios que siguen apoyando a Alberto Fernández pero sin perder de vista que hay tiempo de descuento para el año electoral.
El año que viene renuevan gobernaciones veintidós de los veinticuatro distritos del país (solo Corrientes y Santiago del Estero no elijen). Algunos mandatarios tiene aspiraciones de renovar y otros quieren medir su proyección nacional, ya sea como integrante de un nuevo eventual gobierno o directamente para una banca en el Congreso.
UN RECLAMO PUNTUAL A FERNÁNDEZ Y A GUZMÁN
El gobernador chaqueño se reunió con con el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, y la comisión directiva el martes.
El gobernador chaqueño se reunió con con el presidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, y la comisión directiva el martes.
Dos temas serán centrales en la discusión del viernes en Resistencia: la conflictividad interna del Frente de Todos y la idea de pedirle al ministro de Economía, Martín Guzmán, que proponga públicamente un “programa antiinflacionario” para enfriar los precios, según las fuentes consultadas por este medio.
“Queremos generar una expectativa de comportamiento decreciente de la inflación”, se sinceró Capitanich ante los empresarios de la UIA esta semana. Y así blanqueó cual es la intención de la reunión del viernes.
La inflación camina por encima del 60% anual y la canasta básica –que determina el umbral de la pobreza- superará holgadamente en junio los 100.000 pesos para un hogar tipo de una pareja con dos niños.
El 28 de septiembre el Indec publicará su informe sobre la Incidencia de la pobreza y de la indigencia en el primer semestre de 2022. Y, por la aceleración inflacionaria, los mandatarios no tienen esperanzas de una mejora en los indicadores. Quienes tener una respuesta ensayada para entonces.
Además del anfitrión, fueron invitados a la cumbre en Resistencia los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; La Pampa, Sergio Ziliotto; Entre Ríos, Gustavo Bordet; La Rioja, Ricardo Quintela; Catamarca, Raúl Jalil; Santiago del Estero, Gerardo Zamora; San Juan, Sergio Uñac; Tucumán, Osvaldo Jaldo; y Misiones, Oscar Herrera Ahuad.
También se espera que estén los mandatarios de San Luis, Alberto Rodríguez Saá; Salta, Gustavo Sáenz; Formosa, Gildo Insfrán; Chubut, Mariano Arcioni; Tierra del Fuego, Gustavo Melella; y Santa Cruz, Alicia Kirchner presentaron ante el Consejo Federal de Inversiones (CFI) el nuevo espacio de consenso y trabajo.