La huelga es impulsada por tres sindicatos. Complicará vuelos de Aerolíneas Argentinas, de compañías low cost y de empresas internacionales. Se abre un nuevo conflicto por un reclamo por los asientos en business.
El nuevo paro de aeronáuticos por 24 horas, desde el próximo viernes a las 12.00 hasta el sábado a la misma hora, afectará a más de 30.000 pasajeros. La medida de fuerza fue dispuesta por tres sindicatos: la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), luego de una asamblea conjunta.
La huelga afectará tanto a los vuelos de Aerolíneas Argentinas como a los de las dos compañías low cost que operan cabotaje en el país, además de las empresas internacionales. Este martes hubo asambleas en diferentes aeropuertos del país y los vuelos se vieron afectados.
Por el paro de pilotos del viernes pasado, 183 vuelos se vieron afectados y más de 15.000 personas sufrieron las consecuencias.
En medio de los paros los pilotos protestan porque AA no les da pasajes en business para sus vacaciones
En medio de las medidas de fuerza APLA protesta porque Aerolíneas Argentinas no les confirmó a los pilotos pasajes en business para sus vacaciones. Desde el gremio plantearon en un comunicado: “La empresa Aerolíneas Argentinas ha decidido generar un incumplimiento más a nuestro CCT (convenio colectivo de trabajo): de manera unilateral ya no confirma los pasajes vacacionales en Business, lo hace en Turista”.
Desde APLA manifestaron: “Aerolíneas Argentinas solo realiza el upgrade en el aeropuerto, siempre que haya disponibilidad. Se trata de una nueva provocación que solo busca agravar aún más el conflicto, violentando nuevamente el CCT. Más allá de realizar las denuncias pertinentes continuaremos en la lucha por la defensa de nuestros derechos, del CCT y de una retribución justa y acorde a nuestra función”.
Claves del conflicto entre los gremios aeronáuticos y el Gobierno
A raíz de los reiterados paros en el sector aeronáutico, el Gobierno decidió declarar esencial el transporte aerocomercial. Según anunció el Ministerio de Capital Humano, se busca garantizar que haya un servicio mínimo para la población en días de medidas de fuerza.
Luego, la suspensión judicial del decreto 70/23, dejó al Gobierno sin herramientas efectivas para detener estas asambleas informativas. Según fuentes oficiales, no es posible decretar una conciliación obligatoria si no hay un paro formal, lo que permite a los gremios evitar sanciones inmediatas y mantener su plan de lucha.
El conflicto puso en la mira a Pablo Biró, acusado de politizar su liderazgo sindical y causar un grave perjuicio económico a Aerolíneas Argentinas. El Ejecutivo y empresarios denuncian que el sindicalista usa su influencia para desestabilizar la compañía. Desde el gremio defienden su derecho a manifestarse. En este escenario de tensión, los pasajeros continúan siendo los principales afectados, enfrentando cancelaciones y demoras en sus viajes sin una solución clara a la vista.
En tanto Aerolíneas Argentinas anunció que denunciará a los gremios aeronáuticos por los paros y “asambleas informativas” de las últimas semanas, lo que causó pérdidas por US$2 millones, según la compañía.
Asimismo, Aerolíneas iniciará “las acciones necesarias” para expulsar a Biró del directorio de la compañía y desde la Secretaria de Transporte reforzaron “la decisión tomada” para que el titular del gremio de los pilotos (APLA) deje ese órgano de gobierno corporativo. También denunciará al representante de AAA (aeronavegantes), Juan Pablo Rey.
Para Aerolíneas, la conducta del líder de APLA es más grave porque es parte del directorio de la línea de bandera. Por eso, adelantaron que, por pedido de la Secretaría de Transporte, tomarán las acciones necesarias para expulsarlo de ese cargo.
El secretario de Transporte, Franco Mogetta, ratificó la denuncia de Aerolíneas Argentinas y confirmó que la expulsión del sindicalista “es una decisión tomada”. “Se va a convocar a una asamblea para expulsar con causa a Pablo Biró y, luego de esto, avanzaremos con las causas judiciales”, explicó.
En cuanto al reclamo salarial, el funcionario aseguró que las negociaciones paritarias “están abiertas con todos los gremios” y que la línea de bandera propone una recomposición salarial “razonable” y apuntó contra el jefe de APLA: “Él solo defiende sus intereses personales”.
“Estamos dispuestos a dar todas las batallas, no es un capricho. Llevaremos adelante todos los medios posibles para garantizar el servicio”, dijo Moggeta.