El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se reunirá con los líderes de los bloques dialoguistas a quienes intentará persuadir para que apoyen la reforma electoral y política que persigue el Gobierno nacional. El objetivo central es eliminar las PASO, pero aún no hay consenso. En estas horas si cobra peso la posibilidad de la implementación de la boleta única de papel.
Los sectores dialoguistas sí avalan es la implementación de la boleta única de papel, que tuvo media sanción de Diputados y se frenó en el Senado por la falta de un solo voto, el de la rionegrina Mónica Silva.
La novedad es que la boleta única que piensa el poder Ejecutivo se complementa con un sistema de listas abiertas, para que el votante pueda hacer uso de su creatividad y combinar candidatos de distintos partidos o incluso cambiar el orden de los candidatos.
Todavía no hay ni siquiera un esbozo de redacción, por lo que este sistema de listas abiertas no tiene aún una silueta definida, pero queda a las claras que la intención es que el ciudadano pueda hacer un popurrí con su voto, un “Elige tu propia aventura” electoral.
El cambio que hará el Gobierno nacional seguramente tendrá algún tipo de eco en Salta, donde para las elecciones provinciales se utiliza la boleta única electrónica, instaurada por el gobierno de Juan Manuel Urtubey en 2011 y a lo largo de estos años acumuló críticas por los costos y los niveles de vulnerabilidad.
En la Provincia hay un intento de avanzar con la boleta única del papel, pero seguramente la determinación nacional acelerará el cambio también en esta tierra.
Reunión
Francos se reunirá con los referentes dialoguistas se llevará a cabo a las 16.30. El funcionario pretendía que la cumbre se realizara en la Casa Rosada, pero los legisladores de la oposición impusieron su criterio para que se realizara en el Congreso de la Nación, donde juegan de locales.
En el PRO son reticentes a quedarse sin esa herramienta de ordenamiento electoral, al igual que en la UCR y la Coalición Cívica, mientras que en Hacemos Coalición Federal hay posturas divididas, aunque son mayoría las voces en contra.
La única sigla que todos estos espacios de la oposición llamada “dialoguista” está abierta a sacrificar es la “O” final de las PASO, la que refiere al carácter obligatorio de las primarias abiertas.
El planteo es que las primarias no sea obligatorias en aquellas fuerzas políticas que no presenten competencia interna en determinados distritos, y que además los ciudadanos no estén obligados a acudir a las urnas en ese turno electoral.